Diciembre 21 de 2008
Por Azzurro
Hoy es un día difícil para los hinchas azules. Se ha desvanecido uno de los orgullos más grandes con los que contábamos desde hacía décadas: Millonarios ya no es el equipo más veces campeón del fútbol colombiano. Punto.
No es un tema de grandeza. No es un tema de historia. No es un tema de recuerdos ni sueños frustrados. Es una realidad. Luego de 20 años de sequía; luego de estar varias veces al borde de la liquidación gracias a directivos fatídicos; luego de sufrir fracaso tras fracaso, Millonarios perdió hoy uno de sus diferenciales fundamentales. Ya no somos más veces campeones. Punto.
Como hincha que soy, hice hoy- seis meses después de haber rogado a Dios por un campeonato del Chicó- fuerza para que el DIM venciera al América. Pensaba que si por lo menos América no lograba el campeonato, el fracaso de Millos no sería tan hondo. Pero creo que me equivoqué: el simple hecho de tener que hacer fuerza por el DIM para que América no lograra su estrella 13 me hizo sentir mediocre. Terriblemente mediocre.
Si la hinchada entera de Millos hoy le tuvo que hacer fuerza al DIM para que América no saliera campeón, el fracaso de Millonarios es rotundo, histórico y doloroso. Hoy el fracaso de Millonarios, de sus jugadores y directivos, llevó a la hinchada más grande y digna de Colombia a un punto de mediocridad que es inaceptable. No la acepto.
Hoy ya no somos el equipo más veces campeón. Punto. ¿Somos el más grande? Lo veremos…
Suenan pitos en la calle. Oigo Bogotá celebrando un triunfo no propio, extraño. Sueño con el día en que las calles bogotanas se vuelvan a vestir de banderas azules y blancas. De alegría capitalina. Sueño con volver a ser, de nuevo, el más veces campeón. Este es un día muy difícil para nosotros, los hinchas azules.
Azzurro
domingo, 21 de diciembre de 2008
miércoles, 10 de diciembre de 2008
Las fórmulas que se repiten
Diciembre 10 de 2008
Por Azzurro
Algunas personas insisten en que la historia se repite. Otras insisten en que no. Creo que la historia se repite en la medida en la que uno hace que se repita. Pareciera que Millos está destinado a repetir su historia reciente, al repetir fórmulas que han fracasado en el pasado reciente y que no se han corregido. Espero equivocarme.
La grave situación actual de Millonarios requiere que sus dirigentes, empleados, jugadores, cuerpo técnico e hinchas repensemos las fórmulas; retemos la realidad; nos sacudamos de conceptos que creemos inamovibles; pensemos a largo plazo; modifiquemos aquellas cosas que no funcionan y que nos han llevado al punto al que estamos; y que generemos un frente común. Tengo la preocupación que a pesar de sumar la tercera eliminación en línea de la primera fase del torneo colombiano, ni dirigentes, ni cuerpo técnico, ni jugadores ni hinchas estamos haciendo algo real en ese sentido. Quiero equivocarme.
Se ha anunciado oficialmente la llegada del argentino Carlos Marinelli a Millonarios. Es un jugador argentino con una trayectoria interesante que viene de la MLS por un año y con opción de compra. ¿Será un tiro al aire? También se ha anunciado la salida de 10 jugadores (todos suplentes) del plantel profesional. La cuerda siempre cede por el lado más flaco y no creo que Zapata haya sido parte del problema. Igualmente, se ha hecho pública la ratificación de Hurtado (¿su rodilla lo dejará jugar?) y la celebración de la Copa Cafam a finales de enero con la participación de Nacional, América y un equipo argentino que aparentemente no está definido. No se ha sabido de la salida de jugadores titulares, ni de la llegada de otros refuerzos, ni de cambios en el Comité Ejecutivo, ni de planes en las divisiones menores...
Tal vez vale resaltar el hecho de que la llegada de Marinelli se anuncia por esta época y no a escasas semanas de que inicie el torneo. Sin embargo, todas las demás medidas se parecen demasiado a lo que hemos venido viendo en los últimos tiempos y que ya han demostrado su poco valor.
Sin capacidad de inversión a largo plazo, sin un perfil definido de jugadores claro, sin un trabajo profesional en las menores, sin unos tomadores de decisión realmente comprometidos con el equipo (el presidente López, a pesar de sus contradictores y de sus innegables errores, pone la cara y le mete todo su tiempo a Millonarios, lo cual no ocurre con otros miembros de la dirigencia Azul) será imposible revertir nuestra historia reciente. Me preocupa que el esfuerzo por revivir la marca y por activar a la hinchada se esté muriendo por culpa de la repetición de fórmulas que solo nos han llevado a la eliminación. Siento que no se ha tomado ni una sola decisión de fondo y que seguimos en el mismo barco, en el mismo rumbo... Deseo equivocarme.
La historia de Millonarios es el único elemento que aún cautiva, que aún enamora; su hinchada es el orgullo más grande, su única fortaleza en el presente. Millos hoy por hoy es solo eso: hinchada y memoria, gente e historia.
Una pasión como la que es Millonarios no se mata de un día para otro. Es una pasión que a pesar del ayuno y de las desilusiones sigue vigente. Pero ¿hasta qué punto? ¿Hasta cuándo? Aún sigo sin saber qué hacer con mi abono del 2009. ¿Repito mi historia? ¿Opiniones?
Azzurro
Por Azzurro
Algunas personas insisten en que la historia se repite. Otras insisten en que no. Creo que la historia se repite en la medida en la que uno hace que se repita. Pareciera que Millos está destinado a repetir su historia reciente, al repetir fórmulas que han fracasado en el pasado reciente y que no se han corregido. Espero equivocarme.
La grave situación actual de Millonarios requiere que sus dirigentes, empleados, jugadores, cuerpo técnico e hinchas repensemos las fórmulas; retemos la realidad; nos sacudamos de conceptos que creemos inamovibles; pensemos a largo plazo; modifiquemos aquellas cosas que no funcionan y que nos han llevado al punto al que estamos; y que generemos un frente común. Tengo la preocupación que a pesar de sumar la tercera eliminación en línea de la primera fase del torneo colombiano, ni dirigentes, ni cuerpo técnico, ni jugadores ni hinchas estamos haciendo algo real en ese sentido. Quiero equivocarme.
Se ha anunciado oficialmente la llegada del argentino Carlos Marinelli a Millonarios. Es un jugador argentino con una trayectoria interesante que viene de la MLS por un año y con opción de compra. ¿Será un tiro al aire? También se ha anunciado la salida de 10 jugadores (todos suplentes) del plantel profesional. La cuerda siempre cede por el lado más flaco y no creo que Zapata haya sido parte del problema. Igualmente, se ha hecho pública la ratificación de Hurtado (¿su rodilla lo dejará jugar?) y la celebración de la Copa Cafam a finales de enero con la participación de Nacional, América y un equipo argentino que aparentemente no está definido. No se ha sabido de la salida de jugadores titulares, ni de la llegada de otros refuerzos, ni de cambios en el Comité Ejecutivo, ni de planes en las divisiones menores...
Tal vez vale resaltar el hecho de que la llegada de Marinelli se anuncia por esta época y no a escasas semanas de que inicie el torneo. Sin embargo, todas las demás medidas se parecen demasiado a lo que hemos venido viendo en los últimos tiempos y que ya han demostrado su poco valor.
Sin capacidad de inversión a largo plazo, sin un perfil definido de jugadores claro, sin un trabajo profesional en las menores, sin unos tomadores de decisión realmente comprometidos con el equipo (el presidente López, a pesar de sus contradictores y de sus innegables errores, pone la cara y le mete todo su tiempo a Millonarios, lo cual no ocurre con otros miembros de la dirigencia Azul) será imposible revertir nuestra historia reciente. Me preocupa que el esfuerzo por revivir la marca y por activar a la hinchada se esté muriendo por culpa de la repetición de fórmulas que solo nos han llevado a la eliminación. Siento que no se ha tomado ni una sola decisión de fondo y que seguimos en el mismo barco, en el mismo rumbo... Deseo equivocarme.
La historia de Millonarios es el único elemento que aún cautiva, que aún enamora; su hinchada es el orgullo más grande, su única fortaleza en el presente. Millos hoy por hoy es solo eso: hinchada y memoria, gente e historia.
Una pasión como la que es Millonarios no se mata de un día para otro. Es una pasión que a pesar del ayuno y de las desilusiones sigue vigente. Pero ¿hasta qué punto? ¿Hasta cuándo? Aún sigo sin saber qué hacer con mi abono del 2009. ¿Repito mi historia? ¿Opiniones?
Azzurro
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